Las responsabilidades principales incluyen llevar a cabo mantenimientos correctivos en la maquinaria, realizando diagnósticos precisos y reparaciones oportunas. También se requiere realizar mantenimientos preventivos para identificar posibles problemas y solucionarlos de manera proactiva. Se espera que la persona gestione los repuestos y otros recursos necesarios para las intervenciones, como herramientas especiales. Es importante mantener una buena organización del trabajo, asegurando el orden y la limpieza en las áreas de trabajo. Además, se supervisarán las instalaciones y se buscará optimizar la energía del centro logístico. El perfil técnico ideal incluye experiencia en maquinaria utilizada en la industria alimentaria, como sistemas de frío industrial, aire comprimido, neumática, PLCs y calderas de vapor. Se valorará la experiencia en disciplinas eléctricas y mecánicas, especialmente en entornos de automatización, así como la capacidad para realizar múltiples tareas y priorizar proyectos. Es importante tener conocimientos en el funcionamiento de equipos eléctricos, como rotores, paneles, motores y puertas eléctricas. El tipo de contrato ofrecido es indefinido.